Arsenal empató 2-2 frente al “Cervecero” que ya está condenado a jugar la próxima temporada en la primera B Nacional, en la continuidad de la 29na fecha del torneo de Primera División.
Arsenal, que pelea por mantener la categoría, empató esta tarde de visitante con el ya descendido Quilmes, 2 a 2, en partido de la 29na y penúltima fecha del torneo de fútbol de Primera División.
Jonathan Bottinelli y Federico Milo marcaron para el equipo de Sarandí, y Maxi González y Matías Pérez Acuña lo hicieron para el local, todos en la etapa inicial.
La unidad no le alcanzó a Arsenal para salir de la pelea por conservar la categoría. El peso de este empate, por lo tanto, se pondrá de relieve recién el próximo fin de semana, en la última fecha y también en función de resultados ajenos.
Lo cierto es que los de Sarandí, además de prolongar el sufrimiento, se fueron con un sabor amargo: en los últimos cinco minutos desperdiciaron tres chances clarísimas para la victoria, entre ellas un cabezazo en el palo.
Quilmes tomó la iniciativa y tuvo la primera opción clara de gol, a los 5m, cuando Santillo le ahogó el grito a Gabriel Ramírez. Pero fue Arsenal el que pegó antes, a los 9m, con un cabezazo de Bottinelli al palo izquierdo del arco de Rigamonti.
El local llegó rápido al empate (15m), con gol de Maximiliano González también de cabeza, y en el ritmo vibrante que le pusieron ambos al partido otra vez sacó ventaja el “Arse”, a los 28m, con gol de Milo.
Cuatro minutos más tarde, de nuevo empató Quilmes con tanto de Pérez Acuña. De allí hasta el descanso el marcador no se movió, y la igualdad fue un resultado justo para la etapa. El “Cervecero” jugó levemente mejor, sostenido en la tarea en el medio de Obregón, pero Arsenal tuvo practicidad y oportunismo para el gol.
El conjunto de Sarandí salió decidido a buscar el triunfo en el complemento, pero careció de claridad y eficacia en los metros finales de la cancha y Quilmes lo complicó de contragolpe. Sin llegadas en los arcos, el partido mantuvo cierto dramatismo en cruces picantes y algunos roces.
Lo más vibrante ocurrió en los últimos minutos, cuando Arsenal tuvo tres opciones muy concretas de ganar: en el arco de Rigamonti se sucedieron una definición defectuosa de Sánchez Sotelo, un cabezazo en el palo y una jugada confusa en la que pareció haber penal por mano de Andrada. No pudo Arsenal, y el sufrimiento sigue. Quilmes ya sabía de antemano su destino de B Nacional.
En la próxima fecha, trigésima y última, Quilmes se despedirá de la Primera División como visitante de Estudiantes de La Plata (martes 27) y Arsenal buscará la permanencia en su cancha contra Tigre (lunes 26).