Carlos Enrique Sánchez Paredes (22); era el nombre del joven estudiante, quien fue atacado este fin de semana mientras iba a tomar el colectivo para ir a la facultad (UNLP) a rendir un examen de la carrera de ingeniería.
En la mañana del sábado ocho (8) de junio, en Villa Itatí, Bernal, sobre Falucho y Misiones, dos hombres; uno de 24 y el otro de 17 años, golpearon por la espalda con un fierro en la cabeza al joven para sacarle todas sus pertenencias. Carlos fue encontrado en un estado muy grave por su madre, quien al ver que su hijo no contestaba sus mensajes, salió realizando el mismo recorrido que él hizo.
En medio de la conmoción y el pedido de auxilio de la madre de Carlos y su hermana, un vecino salió en su ayuda, llevó a la familia hasta el hospital de Wilde en su auto donde se declaró que el joven había perdido la vida.
La comunidad de Villa Itatí quedó fuertemente conmocionada por el crimen del estudiante. Elizabeth, hermana de Carlos, nos contó que su hermano era técnico electrónico y reparaba los electrodomésticos de los vecinos, muchas veces en vista de las carencias de los mismos, sin cobrarles.
Tal como se lo comentó una vecina a Elizabeth durante la convocatoria que tuvo lugar el martes (11/6), la mujer le dijo que Carlos supo arreglarle un nebulizador que ella necesitaba con urgencia para su hija; y ante la falta de dinero para poder pagarle, no le cobró.
A Carlos le gustaba la música y jugar al fútbol con sus amigos, soñaba con trabajar para la NASA, trabajaba en el CIC (comisión de investigaciones científicas), arreglaba electrodomésticos y los fines de semana solía hacer trabajos extras para tener un poco más de ingresos. Cuando la selección jugaba le gustaba comprar snacks y mirar el partido en familia.
La solidaridad y el respeto con que supo desenvolverse el joven, hizo que ganase el afecto de todos los vecinos de su comunidad, quienes ante lo ocurrido se autoconvocaron el martes (11/6), sobre Dardo Rocha y Montevideo para reclamar justicia por su memoria; fue una jornada respetuosa y pacífica, señaló su familia, “como él lo hubiese querido”.
Actualmente los dos involucrados están apresados. Se busca que el menor (17), cumpla la mayoría de edad en una correccional de menores para que después se lo condene como a un adulto. La familia quiere mantener la vigencia del caso para que se haga justicia. La reacción de la gente cercana ante lo sucedido, es una muestra de quién fue Carlos, nos dijo Elizabeth; “mi hermano fue un tipazo; en medio del dolor, me alegra saber que se notó lo buena persona que fue“.
Martín Benitez para La Noticia Sur